julio 17, 2012

Exigencias

Hace un mes y medio comencé uno de los retos que me había propuesto hace más de un año lograr: obtener un ascenso rápido hacia una gerencia... Pues hoy, a sólo días de obtener el veredicto final, confieso que estoy algo asustada; ya que mi perfeccionismo propio de Virgo no me deja ver todas mis virtudes (aunque muchos me Lo digan) sino mis defectos, que en mi interior, en mi mente y en mi alma se ven del tamaño de un elefante desde pa óptica de una hormiga...

Confieso y me declaró culpable de tenerle un profundo miedo al fracaso, al pensar que sentía y al final del camino no poder... Confieso que le tengo miedo a ser humano y sentirme vulnerable, al perder... A no ser "perfecta" ...

Como todo en la vida, existen varios caminos en dónde siempre van a haber decisiones que tomar. En este caso se me presentó la oportunidad de ejercer 2 cargos en simultáneo: ser gerente de área y ser coordinadora a cargo de uno de los proyectos más complicados de la empresa; si pasados esos 2 meses de prueba todo salía bien, pues me quedaba con el cargo de gerente, si por el contrario aún me faltaban aptitudes para el mismo, pues regresaba a mi cargo original... Obviamente el primero es el objetivo.

Cuando en días como hoy las cosas no salen "perfectas", me barajeo la segunda opción y qué aprendizaje hay de pa experiencia. Seguramente después del período de apatía y auto latigazos, habré aprendido que gerenciar tiene su arte, como una suerte de arte de guerra maquiavélico en donde se tiene que cumplir un arduo trabajo de seguimiento y control, y a la vez aunque pa guerra sea inminente mostrar la mejor cara para el resto... Y quizás en este momento no estaba preparada psicológicamente para ejercerlo...

Pero si por el contrario, si estoy preparada para ello y los vientos astrológicos me favorecen en donde estoy o en otro sitio, pues afilaré mis armas para un nuevo contra- ataque... Pues para qué vivir?, si no se vive una aventura nueva todos los días... Para qué vivir? si no nos retamos a cosas distintas a una aventura ya vuelta rutina...

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2 comentarios:

karina montes dijo...

Vane, el fracaso no es malo. No te dejes engañar por la perfección, a veces se sufre más buscándola (porque nunca estás satisfecha con nada) que madurando con la oportunidad que nos dan los fracasos. Mucho éxito!

Unknown dijo...

Gracias bella!!!